Santo Domingo (EFE).- República Dominicana dio paso el domingo al mar Caribe a tres manatíes que estaban en protección desde hace varios años, para que se reintegren a su hábitat natural y contribuyan al equilibrio en los sistemas marinos.
«Juanita, «Pepe» y «Lupita» se desplazaron a mar abierto tras ser retirada una malla que les mantenía protegidos en una ensenada en Bayahíbe, provincia La Altagracia (este), afirmó el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales en un documento.
Los manatíes antillanos de la especie Trichechus manatus fueron trasladados a ese lugar desde el Acuario Nacional en diciembre de 2020, para que concluyan el proceso de adaptación a su ambiente natural, principalmente al lograr alimentarse exclusivamente con los pastos marinos que encontrarán en la vida silvestre.
Cuatro meses antes fueron sometidos a cambio de alimentación, análisis médicos y registro de comportamientos, entre otros procesos, que han permitido convertir a República Dominicana en un referente en el cuidado de estos mamíferos que se encuentran en la lista de especies amenazadas, afirmó el organismo.
A los manatíes se les colocaron rastreadores que permitirán darles seguimiento durante un tiempo. Esto gracias a la colaboración de la Embajada de Alemania en Santo Domingo y la asesoría del Clearwater Marine Aquarium, de los Estados Unidos.
«Juanita» fue rescatada en agosto de 2012, con solo tres meses de edad, luego de que un pescador le causara más de 10 heridas en diversas partes del cuerpo en Bayahíbe, mientras que «Pepe» fue recuperado en ese mismo año cerca de la orilla del río Haina, provincia San Cristóbal (sur), deshidratado y con varias heridas.
Seis años después, «Lupita» fue salvada al presentar una herida profunda en el lateral izquierdo en el municipio de Luperón, Puerto Plata (norte).
«Los manatíes tienen una importancia vital, pues con el pastoreo que realizan en las praderas marinas, consumiendo grandes cantidades de yerbas y algas, favorecen al ciclo de nutrientes y aportan al equilibrio ecológico en los ecosistemas marinos. Ahí radica la trascendencia de la meta que hoy alcanzamos», dijo el ministro de Medio Ambiente dominicano, Orlando Jorge Mera.
El funcionario recomendó a la población dominicana y a los turistas que visitan el país colaborar en la conservación de esta especie, manteniendo el distanciamiento, además de no suministrarles alimentos y disminuir la velocidad de los vehículos acuáticos en las zonas que han sido identificadas como áreas de manatíes, conocidos también como vacas marinas.