WASHINGTON, D.C. – Desde hace décadas, las estilistas dominicanas han dejado una huella imborrable en el mundo de la belleza, llevando sus técnicas a diferentes rincones del planeta. En la capital estadounidense, Katty Hair Studio se erige como un brillante reflejo de esta rica tradición.
Fundado por la talentosa Kathy De la Paz, el salón se ha convertido en un punto de referencia para quienes buscan el característico secado dominicano, famoso por su capacidad para alisar el cabello sin recurrir a herramientas de calor extremo.
Con más de 15 años de experiencia, De la Paz ha perfeccionado un método que combina destreza y profundo conocimiento de la estructura capilar.
“El secado dominicano no es solo cuestión de técnica, sino de entender el cabello y su comportamiento”, destacó la estilista, quien subrayó la importancia de la formación continua y el trabajo constante para mantener la calidad en un oficio que exige precisión y creatividad.
Más allá de la técnica, el fenómeno de los salones dominicanos en Estados Unidos responde a una comunidad que ha sabido mantenerse unida a través del oficio.
Katty Hair Studio no es solo un espacio de transformación estética, sino también un punto de encuentro donde se comparten historias y experiencias de quienes han encontrado en la belleza un medio de sustento y expresión cultural.
Las exigencias de la industria han llevado a muchas estilistas a diversificar sus servicios y explorar nuevas áreas.
En el caso de De la Paz, su incursión en la fabricación de extensiones y pelucas responde a una demanda creciente de soluciones capilares más duraderas y versátiles.
Sin embargo, la estilista recalca que estas innovaciones no deben reemplazar la esencia del oficio: el trabajo manual y la cercanía con el cliente.
Para muchas mujeres dominicanas en Estados Unidos, espacios como Katty Hair Studio representan más que un simple salón de belleza.
Son testimonio de una herencia cultural que ha sabido adaptarse sin perder su identidad, un legado que sigue creciendo y evolucionando con cada generación de estilistas que apuesta por mantener viva esta tradición.