La Habana, Cuba. – Al conmemorarse el 186 aniversario del natalicio del general Máximo Gómez, la Embajada de la República Dominicana en Cuba, depositó una ofrenda floral en la plaza en honor al luchador en la Guerra de Independencia de Cuba.
El acto, fue encabezado por el embajador dominicano en Cuba, su excelencia, Flavio Amaury Rondón de Jesús, quien resaltó la historia de unión y de hermandad reflejada en el machete desenvainado de Generalísimo Máximo Gómez Báez al luchar por Cuba y la República Dominicana.
“Aquí, en la Habana, en la entrada del túnel de la bahía habanera está la estatua de un hombre a caballo con el machete desenvainado en dirección “al Norte brutal que nos desprecia”, como dijo José Martí, acompañado de dos banderas: la dominicana donde nació y la cubana por la cual luchó como el más cubano de los cubanos”.
Al depositar la ofrenda floral, el embajador Rondón de Jesús, destacó los dotes del general Máximo Gómez, que nació el 18 de noviembre de 1836 en el pequeño poblado de Baní, en provincia de Peravia, en República Dominicana, reconocido por su lucha contra los colonialistas españoles en las Antillas Mayores.
“Máximo Gómez Báez es el símbolo de que República Dominicana y Cuba están unidas indisolublemente a través de los tiempos y hasta el fin de los tiempos; porque Máximo Gómez Báez con su espada signó la historia de este continente y de Las Antillas”, exclamó el embajador, en sus palabras a los presentes.
La actividad, contó con la presencia de Celia Encarnación, Cónsul General de República Dominicana en Cuba, Pastor Vásquez Frias, ministro consejero, Socorro Castellanos, ministra consejera, encargada de cultura, Hatuey Sánchez Galarza, consejero, Cristian Sarante, primer secretario, encargado de asuntos comerciales y Jhomairy Marcell Peralta, segunda Secretaria, de la delegación dominicana en Cuba.
También, el comandante Delio Gómez Ochoa, el ex embajador en Santo Domingo, Omar Córdoba, Michael González, director del Museo de la Ciudad de la Habana e historiador de la Oficina del Historiador de La Habana y Otto Marrero, ex embajador de Cuba en República Dominicana.
Además, una representación de Ministerio de Cultura, del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, médicos dominicanos que estudian especialidades en Cuba, una representación del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba e invitados especiales.
Esta ofrenda floral fue en honor a que un 18 de noviembre de 1836 nació este hombre de complexión mediana, que aceptó el pedido de Martí de organizar, dentro y fuera de la Isla, el Ejército Libertador.
