El libro, disponible gratis en línea, es escrito por Miguel Ledhesma y presentado en el VI Foro Internacional de Periodistas de Turismo. Plantea vivir, con deleite y no como autocastigo, la desconexión digital por 24 horas.
Servicio de prensa
LA CANDELARIA, Colombia.- El periodista y educador argentino Miguel Ledhesma, ha presentado su libro Solidaridad Digital en el 6º Foro Internacional de Periodistas y Líderes del Turismo (realizado en formato presencial y virtual desde Candelaria, Colombia, y transmitido en línea para audiencias de toda Iberoamérica), en el cual plantea vivir un día sin pantallas.
El libro de Miguel Ledhesma, Solidaridad Digital, explora cómo la tecnología puede ser una herramienta para fomentar la empatía, la cooperación y la justicia social en entornos digitales. El título está disponible gratis en: https://www.academia.edu/
Durante el evento, fueron presentadas las ponencias: Periodismo y creadores de contenido, por Katerina Mandrygina (Rusia/México); La importancia de la solidaridad digital, por Ramón Chávez (República Dominicana); Viajar con empatía, por Míriam Martínez Posada (España); Turismo e inteligencia artificial, por Andrés Álvarez Cortez (Chile); Experiencias digitales y vínculos interculturales, por Irina Grassmann (Alemania-Argentina)
Además, fueron expuestos los temas Solidaridad dentro de la OMPT, por Izela Noriega (Panamá) y Comunicación para el desarrollo local, por Alejandra Delgado (Colombia).
En el evento tuvo una participación la presidenta de ADOMPRETUR, Yenny Polanco Lovera, reconocida por los miembros de su directiva por el éxito de las dos gestiones que encarnó en República Dominicana.
Solidaridad Digital promueve los valores de la Organización Mundial de Periodismo Turístico (OMPT) y fue presentado conjuntamente con la campaña #SigueConTuVida, para rechazar los mensajes de odio y prejuicio por las redes sociales.
El Día Mundial de la Solidaridad Digital fue establecido en 2023 por la OMPT, la Asociación Dominicana de Prensa Turística (Adompretur), la Universidad de La Serena (Chile) y la Sociedad Dominicana de Medios Digitales (Sodomedi), con el objetivo de promover el uso ético y responsable de la tecnología para construir un mundo más justo.
Tener un día sin pantallas.
Miguel Ledhesma, en un lenguaje sencillo y dotado de una organicidad expositiva que se asimila a la forma en que mucha gente siente, pero que no lo ha escrito así nunca, expone: Las pantallas se han convertido en nuestra segunda piel. Pero… ¿Y si la verdadera revolución comenzara con un gesto tan simple como no usarlas por un día?
La campaña personal #UnDíaSinPantallas no es una consigna rígida o moralista, —dice—, sino una invitación amorosa a recuperar el contacto con lo esencial: el cuerpo, el tiempo real, la tierra, los vínculos cara a cara, el silencio, la creatividad y, sobre todo, la relación con uno mismo.
Y sigue exponiendo, «Hay que apagar para volver a mirar». El gesto de apagar una pantalla no es una desconexión. Es una reconexión con la energía vital. Es volver a sintonizar con el ritmo natural del cuerpo, con el pulso interno que la inmediatez digital. Apagar pantallas y, al hacerlo —indica el autor se da espacio a una atención más plena, a una percepción más intuitiva y a una escucha más profunda».
En términos neurológicos, al dejar de sobreestimar el sistema dopaminérgico que alimentan las redes, permitimos que el cerebro recupere su equilibrio químico.
El planteamiento de Ledhesma ha sido trabajado con cuidado y tomándose el tiempo para producir reflexiones en torno a una cuestión hiperinformática de la que todos saben que es una cuestión, pero que pocas veces se produce un enfoque teórico a fondo.
El autor expone que #UnDíaSinPantallas también tiene una dimensión energética. El exceso de luz azul, las microfrecuencias y la fragmentación constante de nuestra atención generan un desequilibrio sutil, pero profundo en el campo áurico.
Y agrega: «La fatiga digital no es solo física: es también espiritual. Sentimos que “algo se nos va”, aunque no sepamos exactamente qué; ese “algo” es la conexión con la fuente, con la voz interna, con la verdad que brota en el vacío fértil del no hacer. Por eso, esta campaña no es contra la tecnología. Es a favor del alma».
Lo que trata
El autor indica que no es un día sin redes: es un día en red con la vida. La verdadera red no está hecha solo de fibra óptica. Está hecha de árboles, manos, voces, aire, caminos, abrazos, fuegos. La campaña #UnDíaSinPantallas propone experimentar otras redes: las invisibles. Las naturales. Las que nos sostuvieron siempre.
El gesto, dice Ledhesma, es también un acto político, en el sentido más profundo: elegir cómo queremos habitar el mundo. Reivindicar la soberanía del propio tiempo, la privacidad de los pensamientos, la autenticidad de la experiencia no mediada.
¿Cómo sumarse?
Ledhesma sugiere:
1- Elegir un día a la semana, al mes o al año para no usar pantallas;
2- Avisar con anticipación a quienes puedan necesitar contacto (para no generar preocupación); 3- Planificar actividades que nos conecten con el mundo tangible: cocinar, caminar, leer en papel, ordenar, escribir a mano, meditar, jugar, contemplar, conversar;
4- Registrar la experiencia al día siguiente: ¿Cómo me sentí? ¿Qué noté en mi cuerpo, en mi mente, en mis vínculos? Y por qué no, publicar algo de eso junto al hashtag #UnDíaSinPantallas; un día sin pantallas se puede hacer solo, en familia, en pareja, con amigos o como parte de una comunidad.
Lo importante es sentir que se trata de un regalo, no de un castigo. Una celebración del tiempo propio.